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Corazones de alcachofa caprichos del paladar 12/14

5,30 

Ingredientes: Alcachofas, agua, sal y acidulante (ácido cítrico).

Formato 345 gramos.

Sin existencias

SKU: alcachofas-caprichos-del-paladar-12-14 Categoría: Etiquetas: ,

Descripción

Los corazones de alcachofa son una auténtica delicia para los aperitivicos con un buen chorrico de limón… ¡y si le pones una anchoa por encima se convierten en una perdición!

Peso 0,345 kg
Valor Energético 89 kJ / 21 Kcal
Grasas 0,2 g
de las cuales saturadas 0,1 g
Hidratos de Carbono 4,7 g
de los cuales azúcares 1,06 g
Proteínas 1,7 g
Sal 1,21 g
Fibra 3 g
Pack anchoas y corazones de alcachofa.

La historia de la alcachofa se remonta a la antigüedad y tiene sus raíces en el Mediterráneo. Aunque su origen exacto es incierto, se cree que la alcachofa (Cynara scolymus) es nativa de la región del Mediterráneo oriental, posiblemente en el área que hoy en día corresponde a países como Turquía, Grecia e Italia.

Se sabe que los antiguos egipcios y romanos valoraban las alcachofas tanto por su sabor como por sus presuntas propiedades medicinales. Los romanos, en particular, apreciaban su sabor y la consideraban un manjar exquisito. Se cree que el emperador romano Cicerón cultivaba alcachofas en su villa cerca de Roma.

Durante la Edad Media, las alcachofas se extendieron por toda Europa gracias a los intercambios comerciales y a la influencia de los monjes, que las cultivaban en sus huertos. Sin embargo, su popularidad disminuyó durante la Edad Media, y no fue hasta el Renacimiento que volvió a ser apreciada en la gastronomía europea.

En el siglo XV, Catalina de Médici, una noble italiana que se convirtió en reina de Francia, introdujo la alcachofa en la corte francesa, lo que contribuyó a su popularización en la alta cocina europea. Desde entonces, la alcachofa ha sido un ingrediente destacado en la cocina mediterránea, especialmente en países como Italia, Francia y España.

Hoy en día, se cultiva en muchas partes del mundo, incluyendo Europa, América del Norte y América del Sur. Se utiliza en una amplia variedad de platos, desde ensaladas y guisos hasta pizzas y pastas, y es apreciada por su sabor único y sus numerosos beneficios para la salud. La alcachofa también ha sido objeto de investigación científica debido a sus posibles efectos beneficiosos para la salud, como la protección del hígado y la reducción del colesterol.

En la Región de Murcia y algunas otras regiones de España, es común llamar «alcaciles». Esta variación en el nombre puede tener su origen en la influencia del árabe, ya que la región de Murcia estuvo bajo dominio musulmán durante varios siglos durante la Edad Media.

La palabra «alcacil» proviene del árabe andalusí «al-harsúf», que a su vez deriva del árabe clásico «al-khurshūf». Es posible que su uso se haya mantenido en algunas regiones de habla hispana, incluida Murcia, debido a la influencia cultural y lingüística de la época.